Ambos
clubes han pasado de ser la solución a ser el problema. Ellos quizás no lo
vean. Desde fuera es evidente que sus posturas no van a converger. Esto solo
lleva a perder otro año. Y van muchos.
Cuando
los que pueden ofrecer la solución se enfrascan en batallas “propias”, luchas
de egos y control de poder, en ocasiones, surge una nueva fuerza que ocupa el
lugar abandonado. Una Tercera Vía.
Con
una Unión donde Félix Revuelta no ha conseguido rodearse de gente profesional y
seria, lo que ha conducido a una pésima gestión deportiva y social, reduciendo
año tras año el presupuesto y así las posibilidades de ascender a la Liga
Adelante; y una Sociedad donde sus socios apoyan, pero son escasos y han visto
claramente dónde está su techo (justitos en 2ªB o en Tercera) no se puede
construir un club profesional con cimientos fuertes. El fútbol de Logroño no
puede ser rehén del Sr. Revuelta o de los 700 socios de la Sociedad.
Por
eso es posible que la solución pase por un modelo nuevo. Por un proyecto
totalmente diferente, nacido de las entrañas del fútbol riojano. Un proyecto
que convoque no sólo al fútbol de Logroño, sino de toda la Comunidad. Una
Tercera Vía que no sea presa de un pasado o unos colores, sino germen de una
unión real y sincera de toda La Rioja. Un club de concentración, nacido de la
unión de entrenadores, directivos de todos los clubes y capitaneados por gente
de reconocido prestigio y capacidad del fútbol riojano. Gente nueva, del fútbol de todos los días en La Rioja, alejada de intentos previos como recreaciones, CF´s, uniones o sociedades.
Un
Club que deje morir tranquilo a nuestro querido “Club Deportivo Logroñés”; que
no quiera apropiarse de sus colores, escudo, nombre o historia. Un Club nuevo
que lo recuerde, que lo honre en cada partido, pero sin intentar suplantarlo.
Que sirva para aprovechar algo que nunca se consiguió. Que el jarrero,
calceatense, najerino, calagurritano, arnedado, alfareño y resto de riojanos
sientan el club como propio. Que sea el Club de todos los riojanos y de Haro a
Alfaro podamos juntarnos cada quince días en Las Gaunas.
Alguien
tiene que dar el paso. Es evidente. Quizá algún grupo de empresarios riojanos,
o gente de fútbol que consiga crear ese germen. Los medios de comunicación que
hagan posible que esos futboleros de pro riojanos se junten. Una unión de PP,
PSOE y PR. Solo hace falta un chispazo, porque todo arde si le aplicas la
chispa adecuada.
Imposible,
dirán muchos. Nunca se sabe. Estos días está muy de actualidad un señor que con
un megáfono, twitter, una furgoneta blanca y saliendo en alguna televisión ha
conseguido crear un partido en tres meses y sacar más de un millón de votos.
Por
tanto decir que es imposible es dejar pasar el tiempo para que los que han
podido solucionar el problema en los últimos años sigan enzarzados en ver quién
tiene más razón. Pero la razón dice que en el último derbi, jugándose el
descenso ambos clubes, Las Gaunas no era más que una jaula de hormigón.
Tenemos
al zorro en el gallinero y no lo vemos. Queremos que lleguen a juntarse los dos
clubes, pero son agua y aceite. Y no se representan más que a ellos mismos. Hace
tiempo perdieron la capacidad y legitimidad para liderar un proyecto de fútbol
profesional para nuestra Comunidad.
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